Las Bodas eran uno de los acontecimientos más celebrados y esperados por los amigos y también por los novios.
La víspera de la boda, las jóvenes y mujeres se dedicaban a recoger cubiertos, platos, vasos, mesa, bancos, sillas...., en definitiva cuantos enseres eran necesarios para poder celebrar las comidas y cenas con motivo de la boda.
A su vez los hombres mataban la carne, generalmente machos cabríos (castrados), gallos, conejos, etc. que amigos y familiares de los novios habían entregado. Esa noche se cenaba en casa de los novios parte de lo preparado.
Ese mismo día, los vecinos del pueblo llevaban a casa de cada uno de los novios el "Cumplido", que consistía en garbanzos, judías, aceite, etc. que le serviría al nuevo matrimonio para empezar su nueva vida. A los "Cumplidores" se les solía dar unos dulces por el detalle.
Después de la cena se celebraba el baile. Por la noche, se celebraban las "Ronda de Jamayeros, novios y padrinos". Consistía en ir por el pueblo cantando, acompañado de música, guitarras, acordeón; se iba a rondar a las Jamayeras, que eran las amigas de la novia. Invitaban a los acompañantes o rondantes con una copita de licor y dulces. Los Jamayeros eran los acompañantes del novio encargados de servir el vino en las comidas y cenas.
El día de la boda se celebraba la misa, la comida, etc. Por la tarde, después de la comida y antes del baile de la "manzana", se celebraba el pasacalle. Consistía este pasacalle en recorrer las principales calles del pueblo para que los vecinos que no eran invitados pudieran ver lo guapos que iban la novia y el novio y se iba cantando canciones durante todo el recorrido. Después del pasacalles se hacía el baile de "la manzana", que era cuando los invitados daban el ramo o regalo a los novios. Este baile consistía en que el familiar o amigo que iba a dar el ramo ponía el dinero en un tenedor e invitaba al novio o novia según de qué parte recibiera la invitación.
Por la noche se celebraba un baile, se iba al hogar de los novios y se cantaba la ronda, ellos invitaban a una copa y a dulces.
La Tornaboda, tenía lugar al día siguiente. Los familiares y amigos de los novios se dedicaban a repartir todos los enseres que habían recogido el día de la víspera. Todos estos enseres habían sido marcados para que se supiera a quién pertenecían. Los jóvenes se vestían de novios, padrinos, etc. y salían por el pueblo haciendo un simulacro de boda en plan festivo.